COLUMNA DE ALBERTO OROZCO GUTIÉRREZ
La Filosofía del manejo de la pandemia
ALBERTO OROZCO GUTIÉRREZ
17.04.2020/09:09
Milenio 2020
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La pandemia cambio todo, En enero de 2020 veíamos el brote de un nuevo virus en China, parecía lejano y sobre todo pensábamos que los chinos lo controlarían como habían controlado otros brotes. pero la realidad nos alcanzó, los italianos despertaron en una pesadilla seguidos de cerca por los españoles y al final los todopoderosos Estados Unidos también sintieron el golpe.
Este virus llego para quedarse, no es un asesino que está en nuestra colonia y si no encuentra a nadie nos dejará en paz, este asesino permanecerá en nuestra ciudad, en nuestro país y en nuestro mundo, agazapado, esperando para atacarnos, es paciente y puede ser implacable, no podemos pedirle piedad, no la tiene.
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La filosofía del tratamiento actual es tratar a los enfermos graves , esperar a que el virus tenga compasión, trate bien a algunas personas y se recuperen solas, atacarlo únicamente cuando el enfermo presenta datos de infección generalizada, cuando el asesino ya está en el pulmón y el paciente presenta tos y dificultad respiratoria, en el corazón, con datos de miocarditis, en el SNC con dificultad para oler, en el tubo digestivo y en general en todo el organismo. Desgraciadamente cuando este momento llega el enfermo se encuentra deteriorado y es presa fácil, entonces debemos usar terapias agresivas y caras, ventiladores a los cuales se les ha atribuido un efecto casi mágico, antivirales caros y anticuerpos, el resultado frecuentemente es malo, algunos enfermos a pesar de todo el tratamiento fallecen y otros no pueden recibirlo y también fallecen, los primeros en el hospital, los segundos en casa, durante todo el proceso los enfermos han sido un vehículo de transporte eficiente para el virus, han infectado familia, amigos, clientes, conocidos y desconocidos, el sistema de salud colapsa y la economía también.
Los Chinos remaron contra corriente, buscaron curas, improvisaron y lograron controlar el brote, A principios de marzo de 2020, el grupo del Dr. Raoult Didier, eminente infectólogo marsellés describió 40 pacientes tratados con dos medicamentos de uso común y que se habían usado previamente en infecciones virales, el primero un medicamento ampliamente usado en el mundo para tratar paludismo, artritis reumatoide y lupus eritematoso junto con un antibiótico empleado en todo el mundo para la faringoamigdalitis, todos los pacientes sobrevivieron y negativizaron las pruebas virales en 5 días. el costo total del tratamiento a precios de farmacia es de 1,000.00 pesos por paciente, Esta asociación a dosis terapéuticas normales mostro un panorama alentador y varios investigadores han continuado han empleado este esquema y han surgido nuevos medicamentos comunes y baratos que son prometedores.
Actualmente es necesario que enfoquemos la filosofía a tratar a los enfermos en fases iniciales, es necesario que el diagnostico sea temprano, urge revisar los criterios operacionales que son las normas que siguen los médicos para diagnosticar la enfermedad detectándola en fases tempranas y proporcionemos tratamiento sencillos a los enfermos antes de que se deterioren, esto disminuye la transmisión del virus, abarata los costos de atención, desahoga las instituciones para la atención de los enfermos graves y permite ir formando una población de personas resistentes que van creando inmunidad de rebaño, un cerco sanitario que impide la diseminación.
La única forma de reactivar la economía es volviendo a trabajar, escondernos del virus es una solución a corto plazo, pero algún día tendremos que dejar de escondernos y a largo plazo tenemos que defendernos del asesino que nos acompañará muchos años. El emplear temprana y racionalmente los esquemas de tratamiento de bajo costo y poca toxicidad es un imperativo si queremos lograr derrotar a la pandemia.